¡Deben de existir tantas vidas!
Vidas sin principio ni final,
vidas comunes, arraigadas,
indolentes.
Pero, ¿por qué no de otro tipo?;
vidas sin gobierno,
vidas sin destino,
vidas sin prejuicios.
Vidas con risas, con alegrías,
con besos, con simientes
dichosas, con amores...
pero de los otros.
De esos amores imperfectos,
de los de ojos enloquecidos,
de los de eternas caricias,
de los de jadeos interminables.
De amores que mueren hoy
y resucitan mañana.
¿Acaso viviremos para no
existir?
¿Acaso moriremos antes
de vivir?
JulioElpuente