lunes, 9 de diciembre de 2024

Duermo acurrucado. 2

Duermo acurrucado entre
paredes de cartón, ajeno a
la tutela de un viento sórdido. 
Vivo del aire más puro,
pero me olvidé de la luz;
olvidé su sedosidad, su desatino. 

Recogí mis dulces rodillas
y las atraje hasta mi pecho;
y allí, en el ovillo de mi carne
y mis recuerdos, los errores
del pasado volvieron a desaparecer. 

Las palmas de mis manos
son espejos silenciosos;
son herederas de un pasado
partido en dos,
misioneras en un mundo perdido. 

La mañana despertará después de mí.
Las ventanas, que alguna vez fueron agujeros sin vida,
serán ahora una pantalla multicolor donde la nubes,
desvergonzadas, pasearán
su alegría. 

JulioElpuente