y tras ellas, tus mundos
son mágicos y volubles.
La cadencia de tus pasos
es la secuencia de una
obra maestra,
el renglón que da vida a
todas las quimeras.
Me torturas con la belleza
de tu alma,
con la desfachatez de tu
insaciable mirada.
Tus besos son el destino
perfecto,
forman parte de una panoplia inmisericorde.
Fui uno más de tus acentos,
pero seré el único que vestirá
tu piel con la dulzura de
los versos.
JulioElpuente