Olimpos y regiones sin nombre.
Su estela reunirá nuestras pasiones y nuestros sueños hambrientos.
La creación será un capítulo más de nuestra eternidad.
El consejo de sabios acunará nuestras noches y
pintará nuestras risas al amanecer.
Tras la gran eclosión, nuestros
lamentos ya no serán dolor,
serán piezas de un rompecabezas acorazado.
Nadie que haya oído hablar de nuestro amor podrá soñar nunca más con campos de amapolas y atardeceres inexplicables.
JulioElpuente