mar;
sin esquinas, sin ángulos
rectos.
Nada más elegante que la
noche;
siempre sabe cuando debe
desaparecer.
Nada más benigno que la
luz;
te ilumina para mí,
para el delirio.
Nada más romántico que el
recuerdo;
dormita a mi lado y
me susurra instantes de
una vida policromada,
tibia y fugaz.
JulioElpuente
JulioElpuente