Me invento un final para cada palabra, una sonrisa para cada mohín.
No creer en ningún Dios y creer en cielos, en almas, en paraísos, y tener fe...en ti.
En alguna playa habrá un otoño para recordar, un invierno para reír, una primavera para soñar.
Actos desdibujados, velos opacos, sangre temerosa, saliva perdida, mirada cegadora, fragancias inventadas.
Flores que bailan al son de cualquier amanecer, sabios que estudian el porvenir de las corazonadas.
Todos los encuentros fueron minutos robados a la soledad.
JulioElpuente