lunes, 6 de mayo de 2024

Te desearé.

Háblame del pasado y de sus caricias,
de sus noches y de sus abrazos,
de sus días inolvidables y de sus besos imposibles.
Las canciones románticas nos dejaron absortos, 
abocados a una lujuria histriónica,
a una demencia desmedida.
Si pienso en tu calor
no es por temor;
es por necesidad,
es porque añoro esa cadena
meliflua,
ese resplandor antológico.
Te desearé aunque viva dentro de ti, 
aunque muera dentro de tus ojos,
aunque mi sangre hierva por 
ti.
Saludo a esta primavera 
locuaz,
a esta primavera nacida de 
tus labios,
a esta primavera que florece 
detrás de tu sonrisa.

JulioElpuente